Cerca de 30.000 agricultores y ganaderos de toda España, la mayoría procedentes de Extremadura, Andalucía y Galicia, se manifestaron ayer por las calles de Madrid para exigir al Gobierno la modulación de las ayudas que proceden de la UE, y para pedir una nueva política agraria que lleve a cabo un reparto más justo de las subvenciones comunitarias, que acaparan en su mayoría los ´rentistas´ en detrimento de los pequeños agricultores.
Los manifestantes, convocados por la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), piden además al Gobierno la creación de un estatuto para el agricultor y el ganadero, y un mayor control sobre el precio del vino, el aceite de oliva y la leche para evitar su continua bajada. También exigen medidas para evitar la destrucción de empleo en la actividad agrícola y ayudas directas para el desarrollo rural.
La marcha estaba encabezada por el secretario general de UGT, Cándido Méndez, y el de la UPA, Fernando Moraleda, que portaban una pancarta en la que se leía ´Agricultura familiar, modulación´. Moraleda criticó que el 80 por ciento de las ayudas que recibe España de Bruselas vayan a parar a una minoría de rentistas.Al final, se entregaron al Ejecutivo más de 25.000 firmas recogidas.