El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, no volverá a solicitar una reunión con el presidente del Gobierno, José María Aznar, para hablar del pacto antiterrorista, aunque se mostró dispuesto a dialogar con él «si el señor Aznar quiere». El vicepresidente primero y ministro del Interior, Mariano Rajoy, aseguró que su deseo es «tener la impresión» de que Rodríguez Zapatero mantiene la lealtad en la lucha antiterrorista.
«Yo ya he hecho la reflexión y la petición», dijo Rodríguez Zapatero. «A partir de ese momento, lógicamente, si el señor Aznar quiere, yo estaré siempre dispuesto a tener una reunión, pero, obviamente, no voy a insistir más», añadió el líder socialista, aunque aseguró que es «un poco paradójico» que el primero partido de la oposición se muestre más responsable que el Gobierno en esta materia. De otra parte, el vicepresidente primero y ministro del Interior, Mariano Rajoy, admitió ayer su error al asegurar ayer que la reunión de partidos que se celebró el jueves en Vitoria para tratar la seguridad de los concejales era una «juerga».
No obstante, Rajoy sigue creyendo que esta reunión no era el foro adecuado para tratar el asunto. Tanto el PSE como los partidos del Gobierno vasco criticaron al ministro por usar el término «juerga», por la ausencia de su Ministerio en la reunión y por la actitud del Ejecutivo respecto a ella. «Evidentemente, no es una expresión afortunada, lo que pasa es que uno no siempre acierta en sus expresiones y, a veces, se equivoca». Así se disculpó Rajoy por haberse referido a la reunión de Balza como «una juerga». El Gobierno vasco calificó las palabras del ministro de «frivolidad» y «error».