El ministro portavoz del Gobierno, Pío Cabanillas, se vio obligado a responder a una avalancha de preguntas sobre su participación en la crisis política abierta por la información falsa según la cual Felipe González se habría reunido en Marruecos con Abderramán Yusufi y con Mohamed VI. Cabanillas, que se comprometió a responder al PSOE en el Congreso de los Diputados, aseguró no sentirse responsable de este asunto, que todo se ha debido a una información «mal procesada» por la embajada española en Rabat. Cabanillas aseguró que la polémica abierta por el viaje de González a Marruecos no se ha producido por la mala intención del Gobierno, del embajador español en Marruecos, Fernando Arias-Salgado, o incluso al CESID.
«No hay ninguna razón. y sería una irresponsabilidad entenderlo de otra forma, para pensar que lo ocurrido es algo distinto de una mala información procesada por los servicios de representación diplomática y consular en Marruecos», respondió el portavoz a las quejas socialistas. Según explicó, las autoridades marroquíes aceptaron las disculpas que ayer les presentó el embajador en el marco de un encuentro «cordial». «Si alguien no quiere aceptar estas excusas porque prefiere un escándalo político por otras causas, allá cada cual», explicó el ministro portavoz. Por este motivo, aseguró que no hay ningún motivo para pensar en que Arias-Salgado ya no cuenta con la confianza de las autoridades del reino alauí.
Eso sí, dijo que nadie ha pedido disculpas personalmente a Felipe González, argumentando que las palabras públicas del ministro de Asuntos Exteriores, Josep Piqué, deberían ser suficientes, y no quiso añadir «ni una sola coma» a lo que ya había dicho sobre este asunto su compañero de gabinete. Cabanillas dijo también que él sólo asume las responsabilidades que le corresponde en virtud de su cargo y de su pertenencia al Gobierno, y esta crisis no se ajusta a ninguna de las dos. Por este motivo, aseguró que no ha presentado la dimisión ni ha pensado en hacerlo.
La Ejecutiva Federal del PSOE lamentó ayer el «bochornoso espectáculo» que, a su juicio, ofrecieron los vicepresidentes Mariano Rajoy y Rodrigo Rato y el portavoz, Pío Cabanillas, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en la que Cabanillas se defendió. En un comunicado redactado por la dirección socialista, el PSOE se pregunta «de qué, de quién o de quiénes se reían» ayer Rodrigo Rato, Mariano Rajoy y Pío Cabanillas durante esa rueda de prensa. «¿De los ciudadanos, de los periodistas allí presentes, o de la operación de acoso y derribo montada contra el ex presidente del Gobierno Felipe González?», prosigue el comunicado de la Ejecutiva Federal PSOE.