El Tribunal Nacional del PNV ha decidido expulsar del partido a Emilio Guevara por un artículo publicado en el diario 'Deia' hace más de un año, en el que atacaba al presidente peneuvista, Xabier Arzalluz, al decir que su discurso era «cada vez más hostil, radical y fundamentalista». El ex diputado general aseguró que el verdadero motivo de su baja forzosa no son estas críticas, sino su defensa del Estatuto. Este tribunal notificó el lunes a Guevara esta baja forzosa, aunque tiene fecha del 22 de enero. El tribunal consideró los hechos como falta grave, después de que el mismo órgano del partido en Àlava la considerase menos grave, algo castigado con una simple reprensión y no con la expulsión, como ha sucedido.
La decisión hace referencia a un artículo que publicó Guevara en el diario 'Deia' en diciembre del año 2000. A raíz del mismo se inició un proceso tras las denuncias de afiliados de distintas agrupaciones. En el artículo, que según el tribunal «dañan gravemente» la imagen del partido, denunciaba que el discurso de Arzalluz era «cada vez más hostil, radical y fundamentalista». Guevara no recurrirá la sentencia porque considera que el tribunal no tiene legitimidad, al ser el mismo que formuló el pliego de cargos. Tampoco recurrirá a los tribunales ordinarios para no «causar ningún daño al partido».
El ex diputado general de Àlava achaca su expulsión no a las críticas a Arzalluz, sino a su defensa del Estatuto «como punto de encuentro de todos los vascos, como elemento conformador del poder político y como marco estable de relaciones del País Vasco y España». «Lo del artículo de Arzalluz creo que es anecdótico, fue escrito el 21 de diciembre de 2000, y el expediente ha estado parado muchos meses», dijo, para después añadir que «se ha puesto en marcha y ha desembocado en esta sentencia cuando he seguido escribiendo». «Dicho en plata: si yo no llego a seguir escribiendo o si llego a hacer una especie de autocrítica pública o pido algún tipo de perdón, no me hubieran echado», dijo. Pero rechazó dar este paso «propio de los partidos estalinistas». El ex diputado general de Àlava se mostró apenado por los años y trabajo que ha dedicado al partido, aunque también dijo sentirse liberado de las acusaciones que se vertían contra él por opinar libremente.
Por contra, el presidente del partido, Xabier Arzalluz, defendió la actuación del tribunal. Recordó que Guevara, en su artículo, llamó a la rebelión, y «en cualquier organización eso es bastante grave». «No ha nacido para estar en una organización en la que hay una disciplina, ha nacido para estar en la suya propia», añadió. Arzalluz aseguró que Guevara miente al decir que el tribunal ha sido el único que ha instruido el caso. «Es el único que tiene capacidad para juzgar hechos que pueden ser lesivos para el partido».
La interpretación que se ha hecho desde el PP es aún más dura. El presidente del grupo parlamentario, Jaime Mayor Oreja, aseguró que la expulsión demuestra que «sobraban los autonomistas». «Arzalluz, tras expulsar a un michelín, seguirá avanzando en su posición de convergencia con el mundo de ETA, buscando una construcción nacional y avanzando en la ofensiva nacionalista con esa ruptura a plazos», dijo.