El presidente del Parlamento, Juan María Atutxa, ha aplazado hasta el próximo martes el pleno que debía debatir ayer las enmiendas a la totalidad al proyecto de presupuestos vascos, tras no haber quórum para abrir la sesión plenaria. Atutxa intentó dos veces la apertura de la sesión y en las dos sólo los parlamentarios del tripartito, PNV, EA e IU, estuvieron presentes, mientras la oposición permanecía fuera. Un parlamentario de Batasuna, Joseba Alvarez, entró en la primera ocasión, pero luego se quedó fuera. Tras los dos intentos, Atutxa decidió posponer la sesión hasta el martes a las nueve y media. Para que hubiera quórum hacía falta que estuviesen 38 de los 75 parlamentarios, y los que apoyan al Gobierno sólo suman 36.
Tras el aplazamiento, PNV, EA e IU reconocieron que se abierto una crisis institucional al tiempo que acusaron a la oposición de «compartir la misma estrategia de boicot» al Parlamento vasco, y han hecho un llamamiento a la responsabilidad para que acudan al pleno y defiendan sus proyectos. Desde la oposición, Leopoldo Barreda (PP) anunció que su postura será idéntica el martes «porque la convocatoria es idéntica» y agregó que «no hay ningún pacto de la oposición, sino un manifiesto rechazo a la manipulación del reglamento en favor del Gobierno». Rodolfo Ares (PSE) señaló que decidirán si acuden o no el martes «en función de la convocatoria», y emplazaron al lehendakari y al PNV a «negociar la política que se debe hacer en Euskadi, no sólo los presupuestos».
Desde fuera del País Vasco, el portavoz del Gobierno, Pío Cabanillas, aseguró que «lo mínimo» que puede hacer Atutxa, es «ser sensible con la postura manifestada por los partidos que representan prácticamente la mitad de la Cámara» vasca. Si el martes se repite la falta de quórum, Atutxa ha manifestado su intención de repetir las convocatorias. En caso de que de que se llegue al 31 de diciembre sin conseguir convocar el pleno, el Gobierno Vasco tendrá que prorrogar los presupuestos del 2000 por segundo año consecutivo.