El vicepresidente segundo del Gobierno, Rodrigo Rato, consideró ayer «absolutamente legítima» una subida del sueldo del Fiscal General del Estado, Jesús Cardenal. «Si no me falla la memoria, cuando se revisaron los sueldos de los presidentes de Sala del Supremo, hace varios años, después de 1996, en un acuerdo entre los partidos políticos, hubo un olvido», aseguró Rato en una rueda de prensa en Bruselas. Explicó que, desde un punto de vista jerárquico, los presidentes de Sala del Supremo y otras jerarquías de la Justicia en España «están al mismo nivel que el Fiscal General del Estado».
Según Rato, la revisión de salarios de aquel año afectó también a fiscales del Supremo. Fuentes próximas a la cúpula del Ministerio Fiscal, por su parte, expresaron ayer su malestar por lo que consideran un «agravio comparativo» ante el hecho de que los salarios del Fiscal General del Estado y del presidente del Tribunal Supremo, pese a lo que establece la ley, no estén equiparados desde hace cuatro años.
El malestar se ha hecho público después de la polémica desatada ayer a raíz de que el Grupo Parlamentario Popular en el Senado presentara en la Cámara Alta una enmienda a los Presupuestos que contemplaba una subida de 6'5 millones de pesetas de la retribución del Fiscal General del Estado, y que retiró por la falta de apoyo de los grupos de la oposición.