La policía francesa detuvo ayer al portavoz de Gestoras pro Amnistía Juan María Olano, después de que haya pasado en el país vecino 33 días huido de la Justicia, y se haya dejado ver en público en diversas ocasiones. El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, que fue quien le acusó de participar en el entramado mercantil de ETA por su participación en la organización abertzale, pedirá su extradición, y también estudiará si procede su entrega inmediata o temporal, en virtud del acuerdo firmado con Francia el pasado mes de octubre.
Olano se disponía a entrar en un restaurante tras abandonar la Sociedad Erlea (sede del Comité de Ayuda a presos y Derechos Humanos) de la ciudad francesa de Bayona, en torno a las 13.00 horas, cuando fue detenido por la policía gala. La detención se ha producido gracias a la investigación conjunta de la dirección central de los servicios de inteligencia y de la policía Judicial francesa. Han sido 33 días los que ha pasado Olano en el país vecino, desde que huyera de la operación que ordenó Baltasar Garzón. En ese periodo, el portavoz de gestoras ha aparecido públicamente hasta en cinco ocasiones, desafiando la orden de busca y captura. La última de esas apariciones fue el 29 de noviembre, cuando fue entrevistado por la cadena de televisión pública francesa La Cinquième.
España tiene ahora un plazo de cuarenta días para solicitar su extradición, algo que hará Baltasar Garzón, que fue el juez que dictó la orden internacional de busca y captura internacional contra él el pasado 2 de noviembre, la misma fecha en la que dictó prisión incondicional para once miembros de Gestoras a los que se detuvo en el transcurso de la operación 'Udazken'. A la espera de que llegue esta orden, Olano permanecerá en una prisión francesa alejada del Departamento de los Pirineos Atlánticos. Garzón también estudiará si procede la entrega inmediata o temporal de Olano, en virtud de los acuerdos bilaterales firmados en Perpiñán el 11 de octubre. Según éstos, Francia debería entregar a los terroristas por medio de un mecanismo denominado denuncia oficial por el que los etarras son juzgados en España por los delitos que se le imputan en nuestro país y también por los delitos de carácter menos de los que estén acusados en el país vecino.
Una vez que Garzón confirme la orden de extradición y la reciban las autoridades francesas, Olano tendrá que comparecer ante un juez francés, que le preguntará al presunto etarra si la acepta. Si se niega dará comienzo el procedimiento de extradición. El juez Baltasar Garzón imputó a Olano, como responsable máximo de la estructura ETA-KAS-EKIN que es Gestoras pro Amnistía, por su participación en «el entramado mercantil de ETA» junto con Julen Celarain Errazti. Olano también participa en la captación de fondos para Gestoras. También fue condenado en 1997 por el Tribunal Supremo, junto con los 22 miembros de la Mesa Nacional de HB, por un delito de colaboración con ETA.