El presidente del Gobierno, José María Aznar, dijo ayer que «hay que estar satisfechos» del acuerdo alcanzado con el PSOE para la financiación autonómica, mientras que el secretario general de este partido, José Luis Rodríguez Zapatero, señaló que lo suscribirán por ser «una razón de Estado». Aznar aseguró que se dan todas las condiciones para que el Consejo de Política Fiscal Y Financiera (CPFF) apruebe el próximo viernes un «buen sistema de financiación autonómica», del que dijo va a beneficiar «razonablemente a todos».
Aseguró que el nuevo modelo garantiza razonablemente la suficiencia de la financiación de las autonomías, que se tienen que hacer cada vez más responsables de los recursos que piden a los ciudadanos. Rodríguez Zapatero, afirmó que no es nuestro modelo», pero decidieron suscribirlo por tratarse de una cuestión de Estado, «a la que uno no puede acercarse con dogmatismos» y «sería absurdo quedarse al margen».
Insistió en que en el caso de llegar al Gobierno, «lógicamente, propondremos e introduciremos cambios», pero con el «consenso» y el acuerdo de los partidos políticos y las comunidades. Entre las razones para suscribir el acuerdo citó la necesidad de estabilidad en el modelo de financiación, la conveniencia de que todas las autonomías tengan unos niveles de recursos suficientes para prestar los servicios públicos y una voluntad clara de que esta cuestión no sirva de confrontación.
El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, indicó que la negociación sobre la financiación «se mantiene abierta» y «la mejoraremos» y valoró el hecho de que se lograra un acuerdo con los socialistas. Para la Generalitat, es «el mejor que ha logrado Cataluña en los últimos veinte años» desde el punto de vista político y económico, y permitirá reducir en 800.000 millones de pesetas la dependencia de las transferencias anuales del gobierno central, dijo el «conseller en cap», Artur Mas.