El dirigente del PNV Iñaki Anasagasti acusó al PP de sostener económicamente a los colectivos de apoyo a las víctimas del terrorismo, que respondieron a esta acusación con indignación, al igual que el ministro portavoz del Gobierno, Pio Cabanillas, que la calificó de «miserable e increíble». En declaraciones realizadas por el portavoz en el Congreso del PNV a la cadena de televisión mexicana «TV Azteca», éste acusó al PP de financiar a los colectivos de apoyo a las víctimas del terrorismo, se mostró partidario de «desactivar» estos grupos y dijo que en el País Vasco sólo existen dos organizaciones pacifistas: Gesto por la paz y Elkarri.
Anasagasti indicó que este tipo de organizaciones, como la Fundación Miguel Angel Blanco, el Foro de Ermua, Basta ya, el Foro de El Salvador y la Asociación de Víctimas del Terrorismo, «no surgen de la noche a la mañana, no se mantienen sin la gasolina de un presupuesto económico», aunque reconoció que no tienen pruebas de que estas asociaciones se financien con fondos reservados, sino que era sólo «una intuición».
En la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros, el ministro portavoz, Pio Cabanillas, tras considerar las palabras de Anasagasti como sencillamente «miserables e increíbles». Cabanillas manifestó que, sabiendo que el problema más importante del País Vasco es el terrorismo, no sólo existe la responsabilidad de luchar contra él, sino de respaldar más allá de las palabras y los gestos a todas las víctimas y a todos los que se sientan amenazados para que puedan ejercer sus derechos. Para IU las palabras de Anasagasti «no contribuyen nada a favorecer el reencuentro» de todos los demócratas contra el terrorismo.
Desde la Asociación Víctimas del Terrorismo se restó credibilidad a las declaraciones de Anasagasti y su portavoz Paulino Baena consideró que la palabra sospecha «debería estar prohibida», tras lo cual acusó al PNV de «poner en entredicho la honorabilidad de una organización que lleva 20 años velando por los derechos de las víctimas del terrorismo». El presidente del Foro de Ermua, Vidal de Nicolás, subrayó que los colectivos de apoyo a las víctimas del terrorismo «no son coches bombas para desactivarnos» y negó que su colectivo reciba subvención de alguien. El filósofo vasco Fernando Savater, miembro del Foro de Ermua, calificó de «desvergüenza increíble» las acusaciones de Anasagasti y replicó que es el PNV quien hace el «más descarado clientelismo», pues tiene «a sueldo o a regalitos» a media sociedad vasca.
María del Mar Blanco, presidenta de la Fundación Miguel Angel Blanco, dijo también que si las asociaciones de víctimas del terrorismo han proliferado «como setas» es porque los asesinatos de ETA también lo han hecho.