Todos los partidos excepto EH condenaron ayer el atentado de ETA contra el periodista Gorka Landaburu y lamentaron el desprecio de la banda terrorista a la voluntad que los vascos expresaron en las elecciones del 13-M y su ataque a la libertad de expresión. A sus voces se unió la del Gobierno francés, que condenó «enérgicamente» el atentado contra Landaburu, corresponsal en el País Vasco de varios medios españoles y de la estatal Radio France, y lo enmarcó en «una campaña de intimidación inadmisible». El portavoz del Gobierno Vasco en funciones, Josu Jon Imaz, criticó que ETA haya vuelto a «despreciar la voluntad, a negar del derecho a las ideas, y a vulnerar el pluralismo ideológico», dos días después de que los vascos le hayan «dicho en las urnas» que «desaparezca».
El secretario general del PP, Javier Arenas, aseguró que el atentado demuestra que «la única forma de hablar que tiene ETA es el terror, la violencia y las bombas» y agregó que, mientras se sigan produciendo hechos violentos, su partido defenderá «el vigor, la virtualidad y la fuerza» del pacto antiterrorista. El candidato del PP a lehendakari, Jaime Mayor Oreja, señaló que el atentado «es la confirmación de la barbarie» y de «cómo interpreta ETA cualquier resultado electoral» y abogó por «mantener las mismas convicciones y los mismos principios». Desde el PSOE, su secretario de Organización, José Blanco, insistió en la necesidad de «recomponer» la unidad de los demócratas con «el único objetivo de hacer frente a la barbarie, al terror y la sinrazón» de ETA, mientras que el coordinador de la Ejecutiva del PSE-EE, Rodolfo Ares, denunció su pretensión de «ir exterminando gradualmente la libertad de expresión» en Euskadi.
El PNV, en un comunicado, denunció el objetivo terrorista de lograr «el pensamiento único», condenó el intento de acabar con una vida y atacar la libertad de expresión y recordó que las urnas demostraron que Euskadi es «una sociedad mayoritariamente nacionalista, pero que sigue siendo plural». Recordó además este partido que la víctima es hijo de Xabier de Landaburu, «ideólogo del nacionalismo y vicepresidente del gobierno vasco en el exilio», mientras que la presidenta de EA, Begoña Erratzi, lamentó que ETA haya vuelto a «desoír» la «apuesta por la paz que la sociedad vasca ha realizado en las urnas».
Por su parte, el portavoz de EH, Arnaldo Otegi, afirmó que el atentado «pone encima de la mesa que estas elecciones tampoco han solucionado el problema de fondo de la confrontación armada» y expresó su «alegría» porque «las consecuencias» de la acción terrorista «no son irreparables».