Adiós a la pesca en Marruecos. El Consejo de Ministros de Pesca de la Unión Europea ha dado definitivamente por rotas las negociaciones para alcanzar un acuerdo de cooperación pesquera. La delegación portuguesa no ha logrado obtener apoyos y se ha quedado sola en la defensa de agotar las posibilidades de negociación con Marruecos. Los próximos pasos son claros: la reestructuración de la flota y la eliminación de un tercio de las embarcaciones que faenaban en el territorio alauí. El ministro de Pesca español, Miguel Arias Cañete responsabiliza a Rabat de que no haya podido alcanzarse un acuerdo pesquero, pero los pescadores no se dan por vencidos y anuncian el inicio de movilizaciones de protesta.
La declaración aprobada por los Quince afirma que en las circunstancias actuales, el Consejo concluye que no ha sido posible llegar a un acuerdo mutuo que beneficie al Reino de Marruecos y a la UE, por lo que invitan a la Comisión Europea a que someta lo antes posible un programa de acción específico para la reestructuración de la flota comunitaria. «El programa de reestructuración debe tener en cuenta los aspectos sociales y económicos de las regiones afectadas y dar todas las alternativas posibles a la flota», afirma el texto.
Los ministros han adoptado, por tanto, la posición defendida por el titular español Miguel Arias Cañete, a favor de dar por concluidas las negociaciones y proceder a la reconversión de los casi 400 barcos que faenaban en aguas marroquíes. De este modo, el Consejo ha decidido no dar un nuevo mandato negociador a la Comisión Europea para continuar las negociaciones ni para estudiar las cuatro alternativas al acuerdo que Marruecos propuso en febrero.
La decisión es contraria a las aspiraciones del ministro de Pesca portugués, Luis Capoulas Santos, partidario de intentar cerrar un acuerdo limitado a la flota artesanal. Representantes del sector andaluz que viajaron a Luxemburgo para seguir de cerca las discusiones también pedían la reapertura de las negociaciones con ese país.