El ministro de Economía, Rodrigo Rato, afirmó ayer que el Gobierno está buscando fórmulas flexibles que permitan compatibilizar la edad de jubilación, establecida en los 65 años, con la permanencia en el mercado de trabajo, como permitir una jornada a tiempo parcial con la percepción parcial de una pensión.
Rato señaló que la propuesta del Gobierno es conceder «la mayor libertad» a los ciudadanos para que puedan trabajar, y confió en que se puedan alcanzar «fórmulas positivas» para todos ellos.
«Nuestro deseo es que las personas con una determinada edad que tienen una experiencia y una capacitación profesional puedan seguir trabajando y creando riqueza para la sociedad», subrayó.
El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Juan Carlos Aparicio, reiteró por su parte que se debe dar a la jubilación «un carácter voluntario y flexible» como recoge el Pacto de Toledo, ya que, según dijo, los avances que se han dado en esta materia «son insuficientes».
Respecto a la propuesta sindical de extender la jubilación anticipada a todos los trabajadores, sin necesidad de haber cotizado antes de 1 de enero de 1967, Aparicio indicó que «no se puede ir en contra de las tendencias de todos los países de la Unión Europea», ni adoptar medidas que pongan en riesgo «lo que ha costado mucho conseguir, que es devolver al sistema una razonable y clara salud financiera».
Para los sindicatos, el principal punto que debe incluir el acuerdo es flexibilizar la jubilación, es decir, generalizar la jubilación anticipada a todos los trabajadores con la eliminación del requisito de haber cotizado antes de 1 de enero de 1967, que lleve aparejado el establecimiento de unos coeficientes reductores más acordes a las carreras de cotización.