El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Miguel Arias Cañete, ha solicitado a la Inspección General de Servicios de la Administración Pública que inicien las actuaciones de carácter informativo necesarias para esclarecer su posible vinculación a varias sociedades, aunque aseguró que no ha incurrido en ninguna incompatibilidad.
Según publica 'Interviu', Arias Cañete era hasta el pasado mes de diciembre administrador de la sociedad Arias y Domecq, S.L, que controla otras seis empresas dedicadas a la explotación agrícola y ganadera, y consejero de otras tres sociedades, dos de ellas, Cebingo y Tecnyjuego, relacionadas con el juego. Al parecer, según la publicación, el ministro de Agricultura no declaró su implicación en las mismas en el Registro de Actividades de Altos Cargos.
Arias Cañete manifestó ayer que «alguien me debe tener muchas ganas», pero «tengo la conciencia muy tranquila». Tras desmentir que no tiene «ni un solo duro» en dichos negocios, el ministro de Agricultura explicó que su patrimonio se reduce a fondos de inversión y a algunas participaciones en divisas en algunos inmuebles y «está perfectamente declarado». «No tengo ningún negocio agrícola, no tengo absolutamente una maceta», afirmó Cañete, quien agregó que su mujer, perteneciente a la familia Domecq, «tenía lo que tenía cuando se casó conmigo, tengo separación de bienes y no tengo nada que ver con esos temas».
Asimismo, aclaró que cuando se debaten temas que afectan a su mujer como los relacionados con ganaderías bravas, «me declaro incompatible y no asisto a los consejos de ministros». Cañete explicó además que «hay tres consejos en los que aparezco en el registro mercantil con cargos que nunca me han sido notificados», por lo que «mal puedo dimitir de consejos que no conozco». El ministro de Agricultura señaló que ha puesto este tema en manos de sus abogados para que lo esclarezcan.