El fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, anunció ayer que no actuará contra el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, por sus recientes declaraciones, ya que no encuentra indicios de delito.
Sin embargo, ayer continuaron las críticas, no sólo ya por sus manifestaciones del sábado, sino también por su aclaración posterior. Así, la respuesta más dura fue la del portavoz parlamentario del PSE, Rodolfo Ares, que acusó al presidente peneuvista de «dar ideas» a la banda al interpretar sus actuaciones.
Cardenal aseguró que las declaraciones de Arzalluz, en las que dijo, entre otras cosas, que ETA debía atentar contra el poder y no contra un cocinero, son «excesivas y se le pueden poner todos los epítetos del mundo», pero no tienen «entidad penal». «Por tanto, no se va a hacer nada, no encontramos que sean delictivas o que constituyan delito», añadió.
Los informes jurídicos que ha encargado el Partido Popular coinciden con esta apreciación, según explicó el secretario general del partido, Javier Arenas. Así, explicó que las declaraciones de Xavier Arzalluz «no encajan en los tipos penales previstos en el Código Penal».