Los últimos reveses judiciales han llevado al Gobierno a decidir reformar la Justicia. El ministro portavoz, Pío Cabanillas, respaldó la iniciativa planteada por el ministro de Justicia, Angel Acebes, para conseguir que los magistrados respeten el equilibrio entre los diferentes poderes. Sin embargo, desde el PSOE no se ven con agrado estas modificaciones. El secretario de Libertades Públicas y Desarrollo Autonómico, Juan Fernando López Aguilar, afirmó que la solución de la Justicia «no es controlar más a los jueces».
Los recientes reveses judiciales (el 'caso Liaño' y la congelación del sueldo de los funcionarios en 1997) han provocado que el Gobierno se replantee la reforma de la Justicia. En una entrevista publicada ayer en el diario «El Mundo», Angel Acebes aseguró que esta reforma, que comprende cambios en la Ley Orgánica del Poder Judicial y el sistema de elección de los miembros del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), se llevará a cabo muy pronto, «en las próximas semanas».
El ministro portavoz del Gobierno, Pío Cabanillas, respaldó ayer las palabras de Acebes, aunque precisó más el objetivo de las modificaciones: «Si todas las veces decimos que hay que tener respeto a las decisiones judiciales, también hay que respetar las competencias y las decisiones de los otros poderes por parte de los jueces». «Ese es el equilibrio de poderes», dijo, pensando en los casos del ex juez Javier Gómez de Liaño y en la sentencia de la Audiencia Nacional sobre la subida salarial de los funcionarios.
«Nosotros no tenemos ninguna duda y vamos a defendernos», dijo Cabanillas sobre estos dos casos, confirmando que el Gobierno recurrirá en ambos, «dos cuestiones de trascendencia que, en el fondo, plantean una serie de problemas sobre lo que debe ser la separación de poderes».