El Índice de Precios de Consumo (IPC) aumentó el 0'3 por ciento en diciembre pasado, lo que situó el crecimiento de la inflación en todo el ejercicio 2000 en el 4 por ciento (el objetivo oficial era el 2 por ciento), según el Instituto Nacional de Estadística (INE). La inflación subyacente, que excluye la variación de los precios energéticos y de los alimentos frescos, subió el 0'3 por ciento en diciembre y se situó en el 3 por ciento en el conjunto del año.
El ministro de Economía, Rodrigo Rato, reconoció que la subida de la inflación en el 2000 no es un dato «satisfactorio», pero destacó que la situación «se está corrigiendo con más rapidez de lo esperado». El secretario de Estado de Economía, José Folgado, explicó que los alimentos, la energía y el turismo fueron responsables del 63 por ciento de la subida anual y, respecto al mes pasado, destacó que el incremento respondió «nuevamente» a componentes erráticos y circunstancias excepcionales.
Folgado añadió que, si se mantiene la cotización del euro frente al dólar en torno a 0'95 centavos y el precio del barril de petróleo por debajo de 25 dólares, la inflación descenderá de forma «intensa» a partir de la primavera. Los productos energéticos bajaron el mes pasado el 2 por ciento, con lo que la subida anual se quedó en el 11'2 por ciento, en tanto que los carburantes y combustibles descendieron el 2'5 por ciento en diciembre y acumularon un aumento del 15'1 por ciento.
El descenso de las gasolinas, del 0'8 por ciento, permitió restar al índice general de diciembre algo más de una décima, rebaja que fue compensada por una aportación equivalente del turismo, que subió el 0'9 por ciento. Los grupos más inflacionistas el pasado mes fueron la alimentación, con un incremento del 1'1 por ciento, seguido del grupo de otros "que incluye turismo y hostelería", que subió el 0'7 por ciento, el menaje y la cultura, el 0'2 por ciento, y la vivienda y el vestido, el 0'1 por ciento. El transporte bajó el 0'7 por ciento en diciembre y la medicina descendió el 0'3 por ciento.