El ministro de Sanidad en el primer gobierno socialista de Felipe González, Ernest Lluch, sabía que estaba en el punto de mira de ETA, según afirmó el profesor de Historia Económica de la Universidad de Barcelona Gaspar Feliu, compañero y amigo personal del fallecido.
Feliu aseguró que Lluch le había comentado en ocasiones que «a lo mejor le tocaba» ser una víctima de la banda terrorista, pese a lo cual «no estaba especialmente preocupado» y no llevaba escolta, incluso cuando estaba en el País Vasco, donde veraneaba.
Lluch escribió un artículo en «La Vanguardia» pocos días después de que ETA asesinase al ex gobernador civil de Guipúzcoa Juan María Jáuregui en el que, señalaba que se estremecía con un «acento especial». «Ha muerto alguien por pensar exactamente lo que yo pienso», señalaba. Horas antes de ser asesinado, Lluch bromeaba en un programa de radio que pretendía vivir hasta los 104 años.