El Indice de Precios de Consumo (IPC) aumentó el 0'3% en octubre pasado, con lo que la tasa acumulada de inflación subió al 3'3% y la interanual (últimos doce meses) llegó al 4%, la más alta desde diciembre de 1995, informó ayer el Instituto Nacional de Estadística. La inflación subyacente "que excluye los precios energéticos y alimentos frescos" registró un incremento del 0'1%, para colocarse en el 2'5% en lo que va de año y en el 2'8 por ciento en tasa interanual.
Economía justificó el repunte por el comportamiento de los componentes más volátiles del IPC, unido a la evolución del euro y al encarecimiento del petróleo, mientras que el PSOE e IU reclamaron al Gobierno que modifique su política económica.
Las gasolinas y el gasóleo tuvieron especial incidencia en la inflación del mes pasado, pues sus precios se incrementaron el 0'5% y representaron por sí solos la cuarta parte de la subida del índice general. Por su parte, los carburantes y combustibles registraron un aumento de precios del 1'9%, de modo que, en lo que va de año, la subida llega al 16'0% y la tasa interanual al 18'6.
Los grupos más inflacionistas en octubre fueron los de vivienda y cultura, que aumentaron el 0'7 por ciento respecto a septiembre, seguidos del vestido, que creció el 0'5 por ciento; el transporte, el 0'4 por ciento, y la alimentación y la medicina, el 0'3 por ciento, mientras que el grupo de otros gastos "que incluye el turismo y la hostelería" cayó el 0'6 por ciento.
Los productos y servicios que más se encarecieron fueron la enseñanza universitaria, el pollo, el pescado, la calefacción, el alumbrado y la distribución de agua, y los periódicos, mientras que las bajadas estuvieron protagonizadas por la carne de cerdo, y el turismo y la hostelería.