El ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, reconoció ayer que cometió un exceso verbal al intentar convencer a un agricultor de la intención del Gobierno de sacar adelante el PHN diciéndole que el proyecto saldría adelante «por cojones». En cualquier caso, quiso dejar claro que el talante del Gobierno siempre ha sido dialogante, tal y como ha demostrado en sus continuas conversaciones con las autonomías.
El titular de Agricultura manifestó su sorpresa por el hecho de que una televisión difunda una conversación privada en la que, «probablemente en un exceso verbal», intentaba convencer a un agricultor «sobre la seriedad con que el Gobierno afronta la aprobación del PHN».
En cualquier caso, subrayó que el presidente del Gobierno, José María Aznar, dejó claro «con toda nitidez» que su objetivo es aprobar la asignatura pendiente del PHN, por lo que supone como instrumento de cohesión territorial para España.
Por otro lado, respecto a la petición realizada desde diferentes sectores solicitando su dimisión, Arias Cañete comentó que su cargo es decisión de Aznar y será él quien decida sobre su continuidad al frente del Ministerio.
El ministro de Agricultura se defendió de esta forma en un contexto en el que seguían sucediéndose las críticas, a pesar de los intentos del Gobierno por minimizar el episodio. El vicepresidente primero, Mariano Rajoy, manifestó que «hay que pensar que la gente puede equivocarse y tiene derecho a rectificar, como ha hecho el ministro».