La ofensiva de ETA en los diez primeros meses de 2000, periodo en el que ha asesinado a 16 personas y ha provocado más de 30 heridos, además de múltiples atentados fallidos que han supuesto cuantiosos daños materiales, supone en términos númericos superar las cifras de muertos ocasionados por el terrorismo en España en los últimos años. Según balances anuales de personas asesinadas por ETA, desde 1992, la banda terrorista no había cometido tantos crímenes.
Con la muerte ayer del funcionario de prisiones Máximo Carrera en Vitoria, se elevan ya a 16 las personas asesinadas por los terroristas, la cifra más elevada desde 1992, año en que fueron 26 las personas que murieron víctimas de los atentados de la banda terrorista. A excepción de 1999, año en el que no se produjeron asesinatos debido a la tregua, la actividad de ETA no ha cesado. Si en 1998 los atentados ocasionaron un total de 6 muertos, en 1997, la cifra se duplicó con 13 víctimas mortales. En cambio, en 1996, hubo otros 5 asesinatos, mientras que en 1995 se triplicó llegando a 15 el número de muertos.
Sin embargo, en lo que va de año, ETA ya ha matado a 16 personas. De ellas, a ocho en el mes de agosto y en lo que va de octubre. No obstante, la gran ofensiva terrorista comenzó en julio, periodo en el que hubo dos muertos, pero la organización terrorista colocó varios coches-bomba e hizo otros atentados fallidos, lo que evitó que el número de muertos se disparase aún más.
En julio fue asesinado el concejal del PP en Málaga, José María Martín Carpena. Catorce días después, el 29, el ex gobernador civil de Guipúzcoa, Juan María Jaúregui Apalategui también perdió la vida a tiros mientras se encontraba en un bar de Tolosa.