Hablando en euskera ante unas 100.000 personas reunidas en la plaza de San Pedro, entre ellas el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, el lehendakari, Juan José Ibarretxe, y una nutrida representación de autoridades vascas, Juan Pablo II pidió la intercesión de la nueva santa para que Euskadi sea una «tierra de paz».
«Que el ejemplo y la intercesión de Santa María Josefa del Corazón de Jesús ayuden al pueblo vasco a desterrar para siempre la violencia y Euskadi sea una tierra bendita y un lugar de pacífica y fraterna convivencia, donde siempre se respeten los derechos de todas las personas y nunca más se derrame sangre de inocentes», afirmó el Pontífice en euskera.
El secretario general de EA, Gorka Knörr, corroboró ayer la decisión de su partido de no colaborar con EH dentro de Udalbiltza y señaló a la actividad de ETA y el «silencio» posterior de la coalición abertzale ante la violencia como culpables del actual «estancamiento» de la institución. El portavoz de EH, Arnaldo Otegi, respondió a la decisión advirtiendo que «si el PNV y EA quieren expulsar a EH de la Permanente de Udalbiltza lo que tienen que hacer es convocar una Asamblea Nacional de la institución y decir por qué».
Esta intención de no colaborar con EH fue expresada el sábado por el presidente de la Asamblea de Electos Vascos, Jon Jauregi (PNV), y ratificada ayer tanto por la también jeltzale Josune Ariztondo como por el propio secretario general de EA, Gorka Knörr.
El líder de EA, culpó a la actividad de ETA y el «silencio» posterior de EH de causar el actual «estancamiento» de Udalbiltza. Según dijo, no se puede pretender que concejales y electos se sumen a esta institución mientras ETA asesina a representantes municipales en el País Vasco.