Los sectores más afectados por la subida del precio de los carburantes consideran insuficientes las medidas propuestas por el Gobierno, por lo que mantienen las movilizaciones, bloqueos y amarres, que ayer empezaron a provocar problemas de suministro, especialmente en Catalunya y Valencia.
Las organizaciones agrarias ASAJA y COAG mantendrán las protestas convocadas al considerar «insuficiente» el paquete de medidas fiscales ofrecido el miércoles por el Gobierno, cuyo coste supera los 40.000 millones de pesetas e incluyen un incremento de dos puntos del IVA compensatorio de los productos agrícolas y la deducción de un 35 por ciento de los módulos del IRPF a partir del próximo 1 de enero. También incluye la concesión de créditos blandos por valor de 30.000 millones de pesetas, que serían gestionados por las propias organizaciones agrarias y la constitución de una mesa de trabajo para estudiar que las cooperativas distribuyan gasóleo agrícola a terceros.
La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) criticó la propuesta de la disminución de los módulos agrarios porque sólo beneficia a los que tienen una renta superior a cuatro millones de pesetas, cuando e «la mayoría de los agricultores están por debajo de esta renta». El ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, aseguró ayer que la oferta «supera con creces» la dotación que supondría reducir el Impuesto Especial de Hidrocarburos (IEH), principal reivindicación del sector agrario.
Mientras, los bloqueos de puertos y centrales de la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH) empezaron a provocar problemas de suministros a pesar de que se han empezado a levantar algunos por voluntad de los convocantes, salvo en Córdoba, donde ha intervenido la Guardia Civil para normalizar el acceso a la distribuidora.