El ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, dijo anoche en Sant Adriá del Besós que «hay sospechas de que pueda haber cierta infraestructura» de ETA en Barcelona. Oreja efectuó estas declaraciones durante su participación en una manifestación por las calles de Sant Adriá en repulsa por el atentado del concejal popular.
El titular de Interior señaló que «todavía es pronto» para aventurar hipótesis sobre la infraestructura de la que podría disponer ETA en Catalunya y pidió confianza en las Fuerzas de Seguridad del Estado. En cualquier caso, la policía considera que ETA puede contar con una cierta infraestructura o con algún tipo de apoyo, al haber comprobado que el vehículo en el que huyeron los dos terroristas tras el atentado fue robado hace un mes en Barcelona, según fuentes de la lucha antiterrorista.
Las citadas fuentes antiterroristas, ponen en duda la presencia en Catalunya de un comando estable de la banda y se inclinan por la existencia de una cierta infraestructura o algún tipo de apoyo, sobre todo a nivel informativo para tareas de selección y seguimiento de «objetivos».
El concejal del PP en el Ayuntamiento de Sant Adriá del Besós José Luis Ruiz Casado, muerto ayer en atentado, es la primera víctima de ETA en Catalunya tras la ruptura de la tregua, comunidad donde el último asesinato de la banda se produjo hace seis años. ETA cometió su primer atentado mortal en Catalunya en junio de 1975, concretamente en Barcelona, y desde entonces ha causado 47 muertos en la ciudad y su provincia, incluido el asesinato ayer de José Luis Ruiz Casado. La anterior víctima de ETA en Catalunya fue un civil, Vicente Beti Montesinos, que el 18 de abril de 1994 fue alcanzado por tres granadas lanzadas contra el Gobierno Militar de Barcelona. El atentado más sangriento de ETA en esta comunidad fue el perpetrado en el centro comercial Hipercor de Barcelona, en junio de 1987, en el que murieron veintiuna personas.