El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha propuesto al Gobierno, en un auto dado a conocer ayer, que solicite a las autoridades mexicanas la extradición del ex militar argentino Ricardo Miguel Cavallo, detenido el pasado 24 de agosto en México, y contra quien el pasado día 1 dictó auto de procesamiento por los delitos de genocidio, terrorismo y torturas, durante la dictadura argentina.
Garzón resalta la jurisdicción de España para enjuiciar los delitos que le imputa a Cavallo, en contra del criterio de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, que recurrió la semana pasada el auto. El juez le imputa el secuestro y desaparición de 264 personas, así como la detención ilegal y la práctica de torturas a otras 178, además de la desaparición de 14 mujeres embarazadas y de sus bebés tras el parto. Garzón achaca la comisión de estos delitos a Cavallo durante el tiempo en que perteneció a los grupos operativos de la Escuela Mecánica de la Armada (ESMA), donde que era conocido como Miguel Àngel o Cavallo y con los alias 'Ricardo', 'Marcelo' y 'Serpico'».
En contra del criterio de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, que recurrió la semana pasada el auto de procesamiento dictado por Garzón contra el ex militar argentino, el magistrado resalta la jurisdicción de España para enjuiciar los delitos que le imputa a Cavallo, que considera no han prescrito. A su juicio, «la situación de desaparición impone la calificación de delito permanente y por ende la prescripción no puede comenzar a correr hasta el momento en que conste que la ejecución del delito ha terminado o liberación del detenido, u obligación de facilitar los elementos necesarios para constatar su muerte».
Añade que ninguna de las conductas penales imputadas al ex militar estaría prescrita al haberse iniciado en España el procedimiento por la desaparición de civiles argentinos en julio de 1996 y que el delito de genocidio es imprescriptible.