La dirección de la banda terrorista ETA podría haber decidido desde hace meses emplear una «ruta aragonesa» para introducir en España sus vehículos cargados de explosivos o con terroristas de comandos operativos, según fuentes policiales consultadas por Europa Press. El coche explosionado ayer y las furgonetas-bomba localizadas el pasado mes de diciembre en Alhama de Aragón y Calatayud avalarían esta hipótesis.
Las Fuerzas de Seguridad del Estado estudian la hipótesis de que los comandos etarras encargados del transporte se trasladarían por el sur de Francia a través de la autopista que circula paralelamente a los Pirineos desde Bayona hacia Toulousse. Tras pasar por Orthez, Pau y Tarbes, en paralelo a los puestos fronterizos de Navarra, los comandos se desviarían hacia España ya por la Comunidad de Aragón, que para ellos serían vías más seguras y con menos vigilancia policial que los pasos fronterizos del País Vasco o Navarra. Una vez en la provincia de Huesca, como ocurrió ayer por la N-230 en dirección a Lleida, los terroristas se dirigirían hacia Zaragoza y desde allí a Madrid "como pretendían haber hecho en diciembre".
No obstante, en cuanto al coche explosionado esta mañana, la Policía mantiene que si bien por la dirección en que quedó abandonado en la carretera nacional estaba claro que se dirigía hacia Lleida (dirección sur), no puede confirmarse si con posterioridad iría hacia Barcelona o hacia Zaragoza y Madrid, por lo que se barajan todas las posibilidades.