La Fiscalía de la Audiencia Nacional va a investigar si hay delito en la campaña de desprestigio que la izquierda abertzale prepara contra el juez Baltasar Garzón, según se recoge en un informe policial. Esta campaña contra el juez se debería a las investigaciones que éste realiza del entorno de ETA, sobre todo, después de que estableciera una relación de continuidad entre los diarios 'Egin' y 'Gara'. El Ministerio Público, que intentará determinar si esta ofensiva es delictiva y qué órgano sería el competente para investigar los hechos, ha advertido, en principio, la apariencia de acción delictiva, aunque pedirá más informes a la policía.
La Fiscalía quiere saber si hay delito, por lo que abrió diligencias para estudiar el informe de la Unidad Central de Inteligencia de la Policía que se refiere a esta campaña. Este documento ha sido remitido al fiscal por el propio magistrado. La Fiscalía considera que, en principio, hay apariencia de acción delictiva en la posible campaña de la izquierda abertzale contra Garzón, si bien solicitará a la Unidad Central de Inteligencia de la Policía informes para conocer si se pueden concretar las personas que están detrás de este plan. La Fiscalía tratará de determinar si en esa campaña de desprestigio hay indicios de delito y, en caso afirmativo, se pronunciara también sobre qué órgano judicial es competente para investigar los hechos.
El informe de la policía señala que la ofensiva de la izquierda ´abertzale´ prepara contra el juez quiere difundir que el auto del magistrado sobre el caso ´Egin´ sería una venganza personal contra el abogado Kepa Landa, consejero secretario de la editora de ´Gara´, persiguiendo así recusar a Garzón y apartarlo del sumario. El auto de Garzón señaló la existencia de una sucesión de empresas entre el diario ´Egin´, que fue clausurado en julio de 1998, y su sucesor, ´Gara´, que salió a la calle en enero de 1999. Por eso, el magistrado sugirió el pasado 20 de julio que la editora de éste último, EKHE, debería hacerse cargo de las deudas de 1.000 millones de pesetas de Orain, editora de ´Egin´, así como del pago de indemnizaciones pendientes.