«Los socialistas tenemos que dar respuestas claras al modelo de Estado. Queremos un modelo federal cercano a los ciudadanos, en la España plural». El presidente del Govern, que encabeza la delegación de los socialistas de Balears en el XXXV Congreso del PSOE, definió así su proyecto ante el pleno de los delegados. Antich no tenía previsto intervenir, pero media hora antes de hacerlo se encerró en un despacho para elaborar el discurso, que comenzó con palabras de reconocimiento para el comité político del partido por su labor «en momentos francamente difíciles».
En cuanto a la elección del futuro secretario general del PSOE, la delegación de los socialistas de Balears tendrá libertad de voto. Así lo aseguró ayer a este periódico Francesc Antich quien reconoció que la unanimidad acordada a favor de José Luis Zapatero, que se reflejó en la última reunión en Palma, puede romperse a última hora. Antich afirmó ayer que «vamos a seguir hablando durante todo el día». El portavoz de la delegación balear reconoció que la existencia de cuatro candidatos supuso para él en un primer momento «una gran preocupación» que ya se ha disipado al constatar por sí mismo ayer a través de sus compañeros, que la tan comentada pluralidad de candidatos que tanto se ha criticado, ahora es bien vista a los ojos de todos los delegados. En cuanto a la votación secreta, Antich considera que «es de los avances importantes que se consiguieron en el partido en su momento».
Al hablar de los nuevos mensajes socialistas, Antich reconoce que hay que insistir en la idea de apertura hacia la sociedad porque, según Antich, tiene que dejar de ser «un instrumento en sí mismo y hablar menos de tanta organización interna para lanzar nuestras propuestas de forma clara a la gente». El president del Govern considera que la medicina que debe aplicarse los socialistas españoles se basa en prestar más atención a la sociedad. La solución: ámbitos concretos destinados únicamente a la participación social.