El Gobierno y los principales partidos de la oposición condenaron ayer los últimos atentados que ETA ha perpetrado en Vitoria y en Málaga y coincidieron en reclamar la unidad de los demócratas para luchar contra el terrorismo. Tanto el Gobierno como los partidos mostraron su repulsa ante la nueva oleada de violencia de ETA.
El presidente de la Comisión Política del PSOE y de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, manifestó que «ha habido un intento muy claro de ETA de marcar dramáticamente» este proceso congresual socialista «y afortunadamente no lo ha conseguido». Chaves hizo un llamamiento a la unidad de los demócratas. Chaves consideró además que las últimas actuaciones de ETA «intentan un poco poner en entredicho la actuación policial tratando de atentar en muchos sitios de España con un lapso de tiempo muy breve entre atentado y atentado». A su juicio, consideró necesario «hacer ver una y otra vez al PNV que está en una senda equivocada, que ya no tiene ninguna excusa ni ningún argumento para seguir en la misma estrategia y cambie, como le piden los españoles».
La secretaria general del Grupo Socialista en el Congreso, María Teresa Fernández de la Vega, reiteró el respaldo de su partido a la política antiterrorista del Gobierno de Aznar, si bien le pidió que ofrezca alguna explicación a los ciudadanos sobre la nueva «ola de terror» desencadenada por ETA la semana pasada y que esta mañana vivió un nuevo episodio con el atentado fallido contra el diputado nacional y vicesecretario general del PSOE en Andalucía, José Asenjo. Fernández de la Vega indicó que la situación de terror abierta la semana pasada, «con cuatro intentos de producir masacres, no es razonable ni sensata», por lo que pidió al Gobierno que ofrezca alguna explicación a los ciudadanos. «Los ciudadanos necesitamos una explicación de a qué se está debiendo este recrudecimiento, esta ola nueva, este brote nuevo del terror. El Gobierno tiene que hacer un esfuerzo y dar una explicación a la ciudadanía, sabiendo que cuenta con el apoyo del PSOE», manifestó. Del mismo modo, le exigió algún tipo de iniciativa junto al resto de fuerzas democráticas para frenar el problema etarra.