El Gobierno y los principales partidos políticos condenaron ayer el asesinado del concejal del PP Jesús María Pedrosa y exigieron al PNV y al lehendakari Ibarretxe el abandono de la ambigüedad y de sus pactos con EH para buscar la unidad de los demócratas frente a ETA.
El vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, aseguró desde Durango que «las cosas irán por muy mal camino» mientras «los enloquecidos dirigentes del PNV» no rompan «con EH y ETA». A su lado, el ministro de Interior, Jaime Mayor Oreja, preguntaba al PNV, «después de cinco muertos» tras la conclusión de la tregua, «cuántos más necesita un partido que tiene la responsabilidad de Gobierno para romper con un grupo terrorista». Para Mayor Oreja, «si hubiera la vergüenza democrática que esta situación exige, el lehendakari no tendría que hacer llamamientos a los partidos, sino a su partido» porque «las víctimas son víctimas de una estrategia político-militar» del frente de Estella.
Criticaba así las declaraciones de Juan José Ibarretxe, quien hizo un llamamiento a los partidos políticos para no convertir el crimen en un «ariete de confrontación social», dejar «de lado por un momento nuestras pequeñas miserias y rencillas políticas» y diseñar unidos el camino de la paz.
El presidente del PP vasco, Carlos Iturgaiz, quien acusó a los asesinos de buscar «la limpieza étnica e ideológica» de los no nacionalistas y rechazó «las condenas y los pésames de los fariseos que tienen pactos con ETA y HB».
Mientras, los socialistas vascos expresaron su total rechazo al «vil asesinato» de Pedrosa. «Hay que decirle al PNV y al lehendakari que decidan con quién quieren estar y a los terroristas no sólo que no nos van a ganar, sino que vamos a acabar con ellos», subrayó la dirigente socialista Rosa Díez, como hizo también el portavoz de la comisión política del PSOE, Máximo Díaz Cano, al asegurar que «los asesinos tienen que vernos unidos».
Por su parte, Enrique Múgica, próximo Defensor del Pueblo, consideró que la condena del atentado se queda en «mera palabrería», por lo que le pidió a Ibarretxe que defienda ante la sociedad vasca «el aislamiento social y político» a ETA y a HB.
El coordinador general de IU, Julio Anguita, consideró que «ha llegado el momento de que se moje todo el mundo, de verdad, no con declaraciones», para lo que instó al PNV y a EA a romper todo vínculo con EH y ETA y al PP y al Gobierno a comprometerse a un diálogo sin condiciones previas sobre el futuro de Euskadi.