El secretario general del PP, Javier Arenas, alertó ayer de que el PSOE «está dejando de ser un partido nacional» con sus distintas posturas en materia de paz para el País Vasco, la línea del PSC o las declaraciones de Felipe González, al que aconsejó que se dedique a «escribir sus memorias». Arenas señaló que el PP, «que tiene la misma música y la misma letra en toda España», necesita un «interlocutor para los grandes acuerdos y para ello una dirección clara y sólida del PSOE».
Criticó, en este sentido, que Felipe González se «dedique» a «enredar a su partido en un debate sobre el pasado» y se permita «hacer interpretaciones que nadie comparte» de la transición y de Adolfo Suárez, y aconsejó al ex presidente del Gobierno «tranquilidad y sosiego» y que se dedique a «escribir sus memorias». Javier Arenas señaló que esta línea de González tiene «repercusiones graves cuando no hay una dirección política» en el PSOE, y se refirió asimismo a la actitud del PSC y a su líder Pascual Maragall, en relación a ir contra la unidad del Archivo de Salamanca, y aseveró que en su opinión son «más nacionalistas que Pujol» y «un partido independiente del PSOE», lo que impide que los socialistas «se comporten como un partido nacional».
A esta situación sumó las diferencias de las propuestas de José María Benegas y Nicolás Redondo Terreros en cuanto a la pacificación de Euskadi, y afirmó que los que «tenemos una concepción plural de la sociedad vasca, queremos fundamentalmente la paz y no aceptamos planteamientos del nacionalismo excluyente necesitamos una sola voz y una sola propuesta» en el País Vasco.