Javier Solana, actualmente responsable de la Política Exterior y de Seguridad Común (Mister PESC) de la Unión Europea, podría optar a ser el candidato socialista a la Presidencia del Gobierno para las elecciones del 2004, según aseguraron en medios socialistas.
Las citadas fuentes recalcan que Solana, aunque reside en el extranjero, está en permanente contacto con varios dirigentes del PSOE de la última y la actual etapa, hace frecuentes escapadas a Madrid y sigue con atención la evolución del partido.
Es más, la mayoría de los socialistas que hablan con él están convencidos de que el ex ministro no quiere acabar su trayectoria política en Europa, sino que tiene previsto regresar a la primera escena de la vida política española.
Lo que parece descartarse es que Solana opte a la Secretaría General del PSOE en el congreso del próximo mes de julio, ya que el calendario no parece aconsejable, dado que fue elegido Mister PESC hace apenas un año.
Ahora bien, dado que todas las familias socialistas coinciden en que en el 35 Congreso Federal no se elegirá al candidato a la Presidencia del Gobierno, tarea que se acometerá dentro de unos dos años y, previsiblemente, mediante unas primarias, todo apunta a que será en ese momento cuando Solana opte a dar el paso. Su perfil internacional y su buena imagen en España, unido a su escasa implicación en las confrontaciones internas del partido, serían sus mejores bazas para esas elecciones primarias. Sin embargo, no le será fácil dado que también habrá que contar con quien haya sido elegido secretario general en julio y con otros nombres relevantes del partido, como el de la actual presidenta de los eurodiputados del PSOE, Rosa Díez.
Mientras, la dirigente socialista Cristina Alberdi, responsable de la ponencia marco que debatirá el partido en su próximo congreso, considera que es buen momento para que una mujer opte a ocupar la secretaria general del PSOE a partir de julio.
Alberdi explicó que hay mujeres suficientes en las filas socialistas para liderar la nueva etapa del PSOE y dijo que, al menos, «estaría bien que concurrieran mujeres con normalidad» y que figurasen entre los candidatos a dirigir el partido que, en su opinión, pueden aparecer en las tres o cuatro semanas previas a la celebración del Congreso.