El nuevo secretario general de CC OO, José María Fidalgo, dijo ayer que los objetivos «irrenunciables» de la central serán terminar con el abuso del contrato precario, la demanda de un auténtico plan de igualdad de derechos para las mujeres, la unidad con UGT y el fin de la siniestralidad laboral. Fidalgo, en su discurso de toma de posesión del cargo que asume oficialmente desde ahora, en sustitución de Antonio Gutiérrez, advirtió al Gobierno y a los empresarios que habrá movilizaciones si se incumple la ley en materia de prevención de accidentes laborales.
El nuevo secretario despidió «con orgullo y con pena» a Antonio Gutiérrez porque ha impulsado una «fuerte renovación cultural y política en el sindicalismo español». Subrayó que CC OO no habría llegado adonde está si Gutiérrez no hubiera actuado «con convicción y coraje», sin «arrugarse» ante los problemas por los que ha pasado el sindicato y con la honradez de haberse impuesto un límite de tres mandatos estatutariamente.
Durante este VII Congreso Confederal, dijo Fidalgo, se ha acordado avanzar con UGT en las reivindicaciones y luchas «codo con codo» y, desde «nuestra madurez y autonomía», explorar todos los campos de colaboración, porque así lo demandan «clamorosamente» los trabajadores. Aseguró que la flexibilidad laboral «sólo será positiva y aceptable si va acompañada de seguridad, estabilidad y garantía de protección social en caso de desempleo». «No asumiremos pasivamente las reformas laborales "añadió", las propondremos nosotros a los poderes públicos, lejos de cualquier corporativismo miope y conservador».
Declaró que CC OO demandará «con particular empeño y mayor dureza, si es preciso, cortar el río» de la siniestralidad laboral y advirtió al Gobierno y a los empresarios de que si no se acometen las reformas legales y se cumple la ley en todas las empresas, «taponaremos a fuerza de movilizaciones la hemorragia» de los accidentes de trabajo.