La banda terrorista ETA irrumpió ayer en la campaña electoral con el asesinato del parlamentario socialista Fernando Buesa y de su escolta, el ertzaina Jorge Díez Elorza, mediante un atentado con coche-bomba en las inmediaciones de la sede de la Lehendakaritza en Vitoria. Hace sólo un mes que ETA cumplía su amenaza de atentar con el asesinato del teniente coronel Pedro Blanco García, el pasado 21 de enero, después de que el 28 de noviembre rompiera su tregua indefinida. La capilla ardiente con los restos mortales de Buesa será instalada hoy en el vestíbulo del Parlamento vasco.
A las cinco menos veinte de la tarde, un coche-bomba que hacía explosión al paso del socialista Fernando Buesa, que caminaba en compañía de su escolta, en la calle Domingo Martínez Aragón, cerca de la Escuela de Peritos, en el campus universitario de Navarra y muy próxima a la sede de la Lehendakaritza, costó la vida a ambos. El atentado de ETA -el segundo desde que anunciara su amenaza de matar- irrumpe en la campaña electoral a sólo tres semanas de las elecciones del 12 de marzo.
El método utilizado por los terroristas para asesinar a Fernando Buesa y a su escolta es el mismo que usaron contra el teniente coronel del Ejército Pedro Antonio Blanco García. En esta ocasión, los etarras accionaron el artefacto mediante un radiomando que hizo explotar una furgoneta Renault Express de color blanco al paso del parlamentario y de su escolta. Buesa acababa de salir de su vivienda, un chalet residencial, y se dirigía a pie por un camino que solía recorrer casi todos los días.