Bélgica apelará la decisión del Tribunal Superior de Londres de rechazar el recurso de revisión judicial de una posible liberación del general chileno Augusto Pinochet. De este modo, según comentan los observadores, Bélgica asume en solitario, el protagonismo en el proceso judicial que se desarrolla desde 1998 para impedir la liberación del ex dictador chileno, bajo arresto domiciliario en Londres acusado de terrorismo, torturas y conspiración para la tortura, iniciado por el juez Baltasar Garzón. El Gobierno de Bruselas tomó la decisión de apelar el rechazo del Tribunal Superior de Londres al recurso que había presentado junto con seis ONG's para pedir una revisión judicial del caso Pinochet, informó un portavoz del Ministerio belga de Asuntos Exteriores.
«Los argumentos jurídicos que utilizará Bélgica son más o menos los mismos, pero insistiendo sobre todo en que se concreten los compromisos contenidos en convenciones internacionales, como el Convenio Europeo de Extradición o de Cooperación Judicial de 1959», precisó el portavoz.
Ese aspecto, según consideran los juristas, no ha sido muy sopesado por el Tribunal Superior londinense en los argumentos que emplea para rechazar el recurso belga de revisión judicial del caso Pinochet, dijo el portavoz.
Para tomar la decisión de recurrir, se «examinaron cuidadosamente» todos los argumentos del Tribunal Superior de Londres, en una reunión de urgencia convocada poco después de conocerse el fallo. Los analistas señalan que la apelación que presentará Bélgica constituye muy probablemente la última carta para impedir la liberación de Pinochet y su regreso a Chile.