La Policía Nacional detuvo ayer en Basauri (Vizcaya) y en Bilbao a tres presuntos etarras, acusados de pertenecer al 'comando Vizcaya' que, según fuentes de la lucha antiterrorista, iban a atentar contra un furgón de la Guardia Civil. Los detenidos, Guillermo Merino Bilbao, Jon Urretabizkaia Sahuquillo y Julen Uriarte, fueron capturas después de haber robado un coche a punta de pistola y de haber abandonado maniatado a su propietario. En esta operación se localizó, asimismo, un piso con armas, explosivos y diversa documentación en Bilbao.
El coche-bomba que iban a hacer explotar los miembros del 'comando Vizcaya' iba a estallar al paso de un convoy de la Guardia Civil en el barrio bilbaíno de San Adrián. La intención de los terroristas era hacer explotar el coche-bomba y huir en el segundo vehículo, un Opel Kadett robado. El director general de la Policía, Juan Cotino, se encuentra en Bilbao donde se desplazó para seguir de cerca la operación policial.
El Ministerio de Interior informó de que Merino y Urrutabizkaia robaron, a las 5.30 horas de la madrugada, a punta de pistola y en nombre de ETA, un vehículo Opel Kadett de color negro en la localidad vizcaína de Galdácano y abandonaron a su propietario atado a un árbol en la carretera que va al campo de fútbol. Posteriormente, un comunicante anónimo, que dijo hablar en nombre de ETA, avisó a las nueve menos cinco de la mañana a la asociación de ayuda en carretera DYA de que una persona se encontraba atada en una carretera de Galdácano.
Tras conocerse este suceso, el Cuerpo Nacional de Policía alertó a todos sus dispositivos de control y uno de estos operativos policiales localizó en la calle Beato Valentín de la localidad vizcaína de Basauri al citado vehículo. Los agentes se dirigieron al coche robado y cuando se acercaban los dos ocupantes intentaron escapar y colisionaron, en sus huída contra el coche policial.
Tras el choque, los policías se identificaron y empuñaron sus armas reglamentarias, momento en que los presuntos etarras, que iban encapuchados con pasamontañas, encañonaron a los agentes son sus pistolas, una Sigsauer y una Star. Finalmente, fueron reducidos sin que se produjeran disparos los presuntos etarras Merino Bilbao y Ander Urretabizcaia.