El Consejo de Administración de Telefónica, reunido ayer por primera vez tras el debate de las 'stock options', expresó, pese a las críticas generadas, su total apoyo al presidente de la compañía, Juan Villalonga, en el asunto; defendió los planes aprobados en su momento para incentivar a los directivos; y recordó que esta práctica es algo habitual en otras compañías del sector.
Los consejeros de la compañía se reunieron en un clima de cierta tensión que se fue disipando a medida que se desarrollaba la reunión, cuyas conclusiones fundamentales fueron: considerar que el plan de las opciones sobre acciones es un sistema necesario para el futuro de la empresa, pero pedir a Villalonga un mayor esfuerzo para explicarlo a la sociedad y una mayor transparencia.
El presidente de Telefónica, quien, tras leer un informe de gestión, se refirió de lleno a las 'stock options'. Así, defendió este sistema, alegando que es una práctica común en las principales empresas competidoras del sector y destacó su tesis de que se trata de una polémica política.
Además, Villalonga informó de la petición de un informe a la 'Comisión Olivencia' -órgano consultivo especializado en asuntos éticos relacionados con el comportamiento de las empresas y sus directivos-, sobre este sistema de retribución de directivos.