El PP acusó ayer al presidente andaluz, Manuel Chaves, de emplear el anuncio de una subida salarial de los funcionarios como parte de una estrategia de confrontación con el Gobierno central, mientras que el PSOE criticó el «penoso espectáculo» que dio el Gobierno con sus diversas reacciones ante la propuesta de la Junta. Mientras, diversas administraciones autonómicas barajan la posibilidad de incrementar los salarios de sus funcionarios por encima del 2% previsto a través de diversos fondos de mejora.
La Generalitat de Catalunya, por ejemplo, se sumará al conjunto de gobiernos autónomos que quieren pactar una subida salarial para los funcionarios superior al 2% fijado por la administración central y prevé abonar un complemento adicional de entre 1 y 2 puntos, frente al 6% defendido por los sindicatos.
No obstante, reconoció la complejidad de las negociaciones con los sindicatos debido al diferencial de inflación catalana respecto al conjunto del país y «a matices de valoración sobre el coste de la vida, ya que aún no conocemos el IPC oficial de este año y hay opiniones diversas sobre el cierre definitivo del ejercicio, que van desde 0'6 décimas a un punto sobre las previsiones». El secretario socialista de Política Autonómica, Ramón Jáuregui, criticó las reacciones contradictorias del Gobierno ante la decisión de la Junta de Andalucía, y las tildó de «espectáculo bochornoso».