El presidente del Gobierno, José María Aznar, aseguró ayer que «la única fórmula razonable de crear un fondo de reserva es que la Seguridad Social tenga superávit presupuestario, algo que se conseguirá el próximo año, y que haya dos millones más de cotizantes y logremos en España el récord histórico de ocupados, entonces se podrían garantizar las pensiones del futuro en el caso de que haya una mala coyuntura económica».
Para Aznar, «el sistema de protección social y de pensiones no puede estar sujeto al arbitrio electoral y no puede limitarse a dar un aguinaldo o una limosna», sino que «debe garantizar las pensiones del futuro y mejorar las del presente».
En este sentido, José María Aznar indicó que «no es bueno que nadie se suicide, ni siquiera un Gobierno. No es bueno incitar al suicidio, lo que hay que hacer es pensar como se puede garantizar un sistema de pensiones en España que permita que un pensionista de Boecillo (localidad vallisoletana en la que se encontraba) sea igual que uno de Barcelona o uno de Sevilla. El día que esto no ocurra la cohesión social de un país se habrá roto».
Desde el PSOE, Juan Manuel Eguiagaray reprochó al Gobierno que haya «perdido tres años» al no haber completado todavía la separación de fuentes de financiación de la SS fijada en el Pacto de Toledo, ya que de haber cumplido este compromiso habría en estos momento margen suficiente para tener un fondo de reserva para las pensiones de casi un billón de pesetas.
Para el PSOE, el «debate más urgente» es «como solucionar el
escandaloso incumplimiento del Pacto de Toledo».
Eguiagaray consideró también «primordial» sacar el debate de la
subida de pensiones de la discusión presupuestaria, donde la ha
emplazado el Gobierno, y volvió a exigir que el Ejecutivo acometa
este aumento de las prestaciones más bajas de forma inmediata y a
través de un Real Decreto Ley con efectos retroactivos para todo el
año 1999.