El presidente del Gobierno, José María Aznar, se refirió ayer a la decisión adoptada el miércoles por el Partido Aragonés (PAR) de pactar con el PSOE en Aragón, que llevará a que los 'populares' pierdan el Ejecutivo de esta región, advirtiendo que no tiene dudas de cuál va a ser el futuro, especialmente de algunos. El jefe del Ejecutivo, que concluyó ayer en Jerusalén su gira por Oriente Próximo, indicó que ya había manifestado cuál es su posición sobre algunos pactos. En concreto, la pasada semana Aznar calificó los pactos del PSOE de «apaños» y «chapuzas», indicando que estos inhabilitaban a los socialistas a aspirar a la Presidencia del Gobierno. En el futuro, dijo ayer Aznar, «se verá quién tiene razón y quién actúa coherentemente». «Esto es lo importante», continuó, «y no tengo duda de cuál va a ser ese futuro especialmente para algunos. Pero eso ya se verá. Cada uno es libre de pactar con quien le parezca con más o menos coherencia y nada más».
Entretanto, y con el apoyo ya asegurado, el presidente del PSOE-Aragón, Juan Alberto Belloch, y el portavoz del grupo parlamentario socialista, Francisco Pina, propusieron ayer al presidente de las Cortes, José María Mur, al candidato socialista Marcelino Iglesias para la investidura a la presidencia del Gobierno autónomo al considerar que es el «idóneo y cuenta con una mayoría suficiente», según dijo Belloch.
Mur comenzó ayer por la tarde la segunda ronda de consultas con los grupos parlamentarios para comprobar el grado de apoyo del candidato Iglesias y poder proponer su nombre el próximo lunes tras la convocatoria de la Mesa de las Cortes. Tras la reunión, Belloch explicó a los medios de comunicación que expusieron a Mur los motivos para esa denominación al candidato de «centro izquierda» y confió en que IU vote favorablemente a la investidura de Iglesias, al tiempo que invitó a CHA a que haga lo propio porque «si son una fuerza progresista lo razonable es que lo apoyen».