El juez instructor del 'caso Zamora', José Antonio Martín Pallín, decidió ayer suspender todas las diligencias de la causa, hasta que la Sala de lo Penal acuerde a quien le corresponde la competencia del caso tras la renuncia a sus escaños de los dos parlamentarios del PP imputados, el diputado José Manuel Peñalosa y el senador Dionisio García Carnero, por lo que dejan de ser aforados.
Fuentes jurídicas consideran que la nueva situación supone indefectiblemente que el Supremo perderá la competencia, trasladándose ésta a un Juzgado de Instrucción de Zamora. Por ello, dudan que la instrucción lleve el mismo ritmo que en el Supremo, donde el juez Martín Pallín, en poco más de mes y medio, había tomado declaración a 34 personas, entre imputados y testigos.
La respuesta de los socialistas sobre estas renuncias se han dirigido a asegurar que con las mismas se está asumiendo la responsabilidad en los hechos y a afirmar que el PP ha forzado las mismas porque la instrucción iba «muy rápida». . Así, el secretario general del partido, Joaquín Almunia, señaló que con estas renuncias se «asume una responsabilidad». Añadió que desconocía si se van a producir «más dimisiones» pero se mostró convencido de que «hay más responsables».