El déficit de caja no financiero del Estado descendió un 45'6 por ciento en 1998 hasta situarse en 1'114 billones de pesetas, frente a los 2'048 billones contabilizados en 1997, según los datos facilitados ayer por el secretario de Estado de Presupuestos, José Folgado.
Este dato equivale, en términos de caja, al 1'3 por ciento del PIB, la mitad del obtenido en 1997, lo que permitirá cumplir el objetivo previsto en términos de contabilidad nacional (1'5 por ciento del PIB), que es el método exigido por la UE.
Las cifras definitivas no se conocerán hasta febrero, ya que la Ley de Disciplina Presupuestaria amplió hasta el 31 de enero el plazo de los departamentos de la Administración para contabilizar los gastos comprometidos hasta el 31 de diciembre anterior.
La disminución del déficit ha sido, junto a la estabilidad de los precios, uno de los factores que explican la evolución «tan positiva» del conjunto de las variables económicas, según Folgado.
El déficit de caja de 1998 es resultado de unos ingresos de 17'5 billones de pesetas, que representan un aumento del 9'2 por ciento respecto a 1997 en términos homogéneos (una vez aplicados los ajustes derivados de la cesión del 15 por ciento del IRPF a las comunidades autónomas), frente a unos gastos de 18'6 billones, un 3 por ciento más que en el ejercicio anterior.