La batalla legal de Telefónica en contra de la estructura de tarifas establecida por el Gobierno no tiene fronteras. Tras presentar un recurso en la Audiencia Nacional contra las tarifas de interconexión para el resto de los operadores, la compañía se ha dirigido ahora a Bruselas y ha denunciado al Ejecutivo español ante la Comisión Europea para exigir una nueva revisión de tarifas que permita una competencia «más eficaz y neutral».
El vicepresidente de Telefónica, Javier Revuelta, considera necesario un nuevo reequilibrio tarifario que permita a Telefónica rebajar sus llamadas de larga distancia y subir las locales.
El Gobierno aprobó el pasado mes de agosto la última revisión de tarifas consistente en una rebaja del 5 por ciento en las llamadas provinciales, un 15 por ciento en las interprovinciales y un 12 por ciento de las internacionales, junto con una subida de las locales (de más de 160 segundos) y la cuota de abono mensual en 200 pesetas. Ya entonces Telefónica señaló que era necesaria otra nueva revisión.
Revuelta denunció que mientras que todas las tarifas de Telefónica deben ser aprobadas por la Comisión Delegada de Asuntos Económicos, los nuevos operadores no tienen esa exigencia.