La oposición salió ayer en pleno a denunciar la actuación de la Policía Nacional en el campus de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), cuando los agentes cargaron contra un grupo de estudiantes que se manifestaban en contra de la visita del presidente del Gobierno, José María Aznar. Por el contrario, el portavoz del Ejecutivo, Josep Piqué, justificó la respuesta policial contra lo que definió como la «actitud agresiva» de un «reducido grupo de radicales».
Piqué lamentó tanto las consecuencias de la actuación policial "que se saldó con 19 heridos y cinco agentes lesionados", como las circunstancias, es decir, la visita de Aznar.
Además, explicó que el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, comparecerá el lunes en el Congreso para explicar lo que ocurrió y analizar «qué cosas podrían haberse hecho de una manera distinta, si es el caso», con el fin de adoptar medidas para «procurar que hechos como este no se vuelvan a repetir».
Pero la oposición no se conformará sólo con las explicaciones de Mayor. IU pidió también la comparecencia de la ministra de Educación y Cultura, Esperanza Aguirre, y está pensando en solicitar incluso la comparecencia de Aznar. Además, PSOE e Iniciativa per Catalunya han pedido la dimisión de la delegada del Gobierno en Cataluña, Julia García-Valdecasas.
«Me ha retrotraido más de 20 años», estas fueron las palabras del secretario general del PSOE, Joaquín Almunia. «Aunque la policía tiene que garantizar la seguridad y mantener el orden, me parece un desastre que ordenen cargar contra los estudiantes por el simple hecho de que manifiesten su opinión».
Los rectores de catorce universidades de Catalunya, Valencia, Baleares y de Perpignan (Francia) entregaron ayer un documento a la delegada del Gobierno, Julia García Valdecasas, en el que se solidarizan con el rector de la UAB, Carles Solá.