El líder del PSOE, José Borrell, aseguró ayer que la opinión pública «entendería mal» la aplicación por parte del Gobierno de medidas de política penitenciaria que beneficien a presos de ETA y que éste no hiciese caso del informe del Supremo favorable a un indulto parcial a Barrionuevo y Vera.
Borrell, en la rueda de prensa posterior a la reunión de la Comisión Permanente, reclamó al Ejecutivo que conceda en la próxima reunión del Consejo de Ministros el indulto «total» de los dos ex altos cargos de Interior, José Barrionuevo y Rafael Vera, quienes cumplen condena por el «caso Marey».
Para justificar la reclamación de indulto a los acusados por el GAL, el candidato socialista aludió a las «actuales circunstancias» políticas, con un proceso en el que se incluye el uso de una política penitenciaria como parte de una negociación con ETA «que puede permitir que la tregua conduzca al fin de la violencia».
Más claro y rotundo se mostró el presidente de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, quien tras pedir la «inmediata» puesta en libertad de Barrionuevo y Vera, advirtió que el PSOE puede hacer pagar «muy caro» a Aznar «todo lo que dijo con respecto al terrorismo».
Ibarra recordó que el PSOE tiene 9'3 millones de votos, y aseguró que el PSOE tiene la fuerza suficiente «para permitir que las cosas vayan en paz o para obstaculizar lo que haya que obstaculizar».
El Gobierno podría conceder el indulto parcial al ex ministro y al ex secretario de Estado en la reunión del Consejo de Ministros de mañana, si el expediente del Tribunal Supremo que recomendaba conceder esta medida de gracia llega a tiempo.