El fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, calificó ayer de «insuficiente» el auto de procesamiento dictado por el juez Garzón contra Augusto Pinochet, aunque explicó que la Fiscalía no lo recurrirá por razones de «estrategia».
En su opinión, el testimonio del ex responsable de la DINA Manuel Contreras, en el que decía que no tomaba ninguna decisión sin contar con el beneplácito de Pinochet, aunque «pueda ser significativo», no es suficiente para ir a juicio, porque como militar es lógico que responsabilice a sus superiores.
Preguntado si el no recurrir el auto se podía interpretar como un cambio de actitud de la Fiscalía, el fiscal jefe lo negó y recordó que seguía considerando que la Justicia española no era competente para enjuiciar estos hechos, a pesar de lo dicho por la Sala de lo Penal, «pero no lo vamos a decir todos los días».
En este sentido, indicó que Pinochet sólo podría ser juzgado en España por el delito de torturas, ya que el genocidio y el terrorismo no aparecen entre los delitos por los que el ministro de Interior inglés ha admitido el proceso judicial de extradición.
La batalla judicial sobre la extradición a España del dictador chileno adquirió ayer una nueva dimensión al incorporarse a ella, por primera vez, el Gobierno de Chile. Sus abogados presentaron ayer un recurso impugnando la imparcialidad de Lord Leonard Hoffman, vinculado a Amnistía Internacional y que votó en contra de la inmunidad del general.
El Comité de Apelación de la Cámara de los Lores examinará hoy la petición de los abogados de Pinochet, considerada como histórica, de apelar la decisión de los Lores de revocar la inmunidad del ex dictador, hecho que dio vía libre al ministro de Interior británica, Jack Straw, para dar iniciar los trámites de la extradición en los tribunales. Además, los abogados de Pinochet confirmaron que presentarán un recurso contra la decisión de Straw de dar el visto bueno al procedimiento de extradición.