Coincidiendo con el puente de mayo, Palma ha vivido este viernes una jornada de auténtico colapso en el centro de la ciudad. A la alta afluencia de residentes y visitantes por este periodo festivo, se ha sumado la llamada operación nube –el fenómeno que se repite cada vez que el mal tiempo ahuyenta a bañistas y excursionistas, concentrando a miles de personas en las calles comerciales del centro– y la llegada simultánea de cinco cruceros, que han desembarcado a unos 9.000 turistas.
Fuentes de la Policía Local confirman que, aunque no ha habido incidentes graves, se han producido importantes retenciones de tráfico en zonas como Avenidas, que está actualmente en obras, Jaime III, Sindicato o la plaza de España, donde se ha notado la afluencia masiva de peatones. Muchos turistas que tenían previstas excursiones por la isla han optado por quedarse en Palma ante la inestabilidad del tiempo.

La coincidencia de varios cruceros de gran tamaño ha contribuido al caos. Entre los buques que han recalado en el puerto, se encuentran el Celebrity Equinox, el Mein Schiff 5 o el MSC Splendida, todos ellos con capacidad para varios miles de pasajeros. A ellos se han sumado dos megayates de lujo, el Evrima y el Le Laperouse.
Desde primera hora de la mañana, la ciudad ha experimentado una fuerte presión turística. Comercios, cafeterías y mercados han recibido una avalancha de visitantes, en una jornada marcada por el primer récord crucerístico del año. Para este mes, se prevén 64 escalas de cruceros, un 3,2% más que en mayo del pasado año.
Las autoridades locales han reforzado la presencia policial y los dispositivos de seguridad, aunque insisten en que la situación ha sido «intensa pero controlada». La temporada alta en Palma arranca fuerte y con retos de movilidad ya desde el inicio.
A primera hora no puedes ni salir a correr ni en bicicleta por ninguna parte de Palma ,hemos perdido la guerra mallorca será nórdica y alemana en pocos años y la gente de aquí a vender el piso para largarse a la península