Más de un millar de personas salió este jueves a la calle en Palma en una de las manifestaciones del Primero de Mayo más combativas de los últimos años. Bajo el lema Proteger lo conquistado, ganar futuro, las principales reivindicaciones de la clase trabajadora volvieron a resonar en una jornada marcada por la exigencia de mejores salarios, la reducción de la jornada laboral y el acceso a una vivienda digna, con el mar de fondo de los conflictos abiertos por el convenio de hostelería y la huelga de las escoletas externalizadas del Ajuntament de Palma.
Convocados por los sindicatos mayoritarios, UGT y CCOO, los manifestantes partieron pasadas las 11.45 horas de la Plaza España y recorrieron las avenidas Alexandre Rosselló y Gabriel Alomar para acabar en el Parc de la Mar. Con el sol agazapado entre las nubes altas y el polvo sahariano en suspensión, y acompañados de tambores, pancartas, banderas y cánticos, reclamaron un modelo económico más justo y sostenible para Baleares, en un ambiente festivo pero también cargado de mensajes de advertencia.
Al inicio de la marcha, los líderes sindicales mostraron su preocupación por los jóvenes que, con sus salarios, no pueden tener una vivienda digna ni un proyecto de futuro en las islas y se ven obligados a abandonarlas. «Pese a que las cifras de ocupación son buenas y a que la economía crece, los empresarios se resisten a las subidas salariales, lo que no es consecuente con la buena marcha de sus beneficios empresariales. No hay un reparto justo de esos beneficios y los que más pagan esta injusticia son los jóvenes, a los que están expulsando de su casa y eso no lo vamos a permitir», reprochó el secretario general de CCOO en Baleares, José Luis García, en referencia a la negociación del convenio de hostelería. García calificó de «insulto», la propuesta de las patronales del sector hostelero de una subida salarial del 8,5 % en tres años, menos de la mitad del 19 % de aumento que proponen los sindicatos: «La huelga es un último recurso, pero no la descartamos si no se acercan posiciones. Vamos a movilizar todo lo que haga falta», afirmó García.
En la misma línea se expresó el secretario general de UGT en las islas, Pedro Homar, «la patronales de hostelería consideran desorbitada nuestra petición de aumentar un 19 % los salarios en tres años cuando ni tan solo bastará para hacer frente a los precios de la vivienda». Homar ve inexorables tanto la subida salarial como la reducción de jornada y advirtió: «Torres más altas han caído. Con el salario mínimo interprofesional (SMI), la reforma laboral y de las pensiones también pusieron muchísimas pegas. Reducir la jornada laboral y subir los salarios del personal de hostelería es innegociable a la vista de los resultados económicos del sector en los útimos años», subrayó.
La secretaria general del PSIB-PSOE, Francina Armengol, instó al Govern de Prohens a interceder en el convenio autonómico de hostelería que negocian patronales y sindicatos para fomentar una subida salarial que beneficie a los trabajadores del sector tras recordar que durante las dos legislaturas en las que estuvo al frente del Ejecutivo, se llegó a acuerdos tripartitos que favorecieron un incremento de sueldo en el convenio de hostelería de un 25 %. «Le exijo al Govern de Baleares que no se ponga de perfil», dijo la también presidenta del Congreso de los Diputados, que expresó su deseo de que el proyecto de ley de reducción de jornada laboral tenga la mayoría necesaria cuando se tramite en el Congreso. Armengol reprochó al Govern que promueva viviendas «solo para ricos de estas islas y de fuera» y pidió a Prohens que haga uso de la Ley de Vivienda estatal para declarar zonas tensionadas y poder limitar los precios de los alquileres.
Por su parte, la presidenta del Govern, Marga Prohens, reconoció en este 1 de mayo el papel de «todos aquellos que con su trabajo, dedicación y esfuerzo contribuyen al dinamismo, al bienestar y al progreso» de la sociedad balear. En un mensaje en la red social X, resaltó que Balears lidera la creación de ocupación y la contratación indefinida en España
La marcha, en la que participaron representantes de todos los partidos de izquierda y de la plataforma ‘Menys Turisme, més vida’ acabó en el Parc de la Mar con una concurrida torrada popular.
........Tiene usted razón. Mienten hasta cuando duermen.