Calma tensa en el aeropuerto de Palma a la espera de comprobar como afecta a su programación de vuelos para este lunes el apagón repentino que ha dejado sin luz, desde las 12:30 h., a empresas y hogares de toda España, Portugal y Andorra. La avería está afectando a toda la península y, según relatan algunos usuarios, también de parte de Francia.
Balears, además de Canarias, tiene suministro eléctrico por lo que Son Sant Joan funciona como un día habitual, pero en el aeropuerto siguen recabando información para ver de qué manera afecta el apagón en la península a los 742 vuelos que tiene programados para este lunes, entre salidas y llegadas. Tampoco han habido problemas derivados del apagón en los aeropuertos de Menorca e Ibiza, según han indicado desde Aena.
Aena ha indicado que el apagón eléctrico está generando «algunas incidencias en los aeropuertos», aunque están activos los grupos electrógenos de contingencia. Según estas mismas fuentes. El aeropuerto de Barcelona opera con «toda normalidad» gracias a un sistema de suministro alternativo. La web de seguimiento de vuelos Flight Radar relata que el aeropuerto de Barajas ha estado inactivo en salidas y llegadas durante al menos media hora, pero desde las 13:30 h. se ve movimiento de aeronaves en torno al aeródromo.
Aena pide a los viajeros que se consulte con las aerolíneas porque "podría haber incidencias en los accessos y los medios de transporte terrestres". Una vez levantado el suministro eléctrico a través de generadores propios, desde el gestor aeroportuario se ha señalado que sus infraestructuras están operativas y que el impacto en los vuelos "dependerá de las dificultades de pasajeros y tripulaciones para llegar". Desde Aena reconocen posibles retrasos aunque, de momento, no se habla de cancelaciones de vuelos.
Red Eléctrica Española (REE) anunció hacia las 13.00 horas la activación de planes de reposición del suministro «en colaboración con las empresas del sector tras el cero ocurrido en el sistema peninsular». La compañía explicó que se están analizando las causas del incidente y que se han destinado todos los recursos disponibles para solucionarlo.
La caída de la red eléctrica provocó el apagón de hogares, empresas y comercios en todo el territorio peninsular. Además, los usuarios comenzaron a experimentar problemas de acceso a internet y redes móviles, complicando aún más las comunicaciones. El portal de REE reflejaba una caída total de la demanda eléctrica a las 12.30 horas y, pasada la una de la tarde, el servicio todavía no se había restablecido.
Desde Endesa confirmaron que la avería tenía un alcance nacional y que estaban a la espera de que REE pudiera reconectar el sistema, aunque en ese momento aún se desconocía el tiempo necesario para solucionar la incidencia.
El apagón también paralizó los servicios ferroviarios. Los trenes de alta velocidad (AVE) quedaron detenidos, lo que obligó a los servicios de emergencia a desalojar la estación de Atocha en Madrid. Adif informó poco después de que la incidencia había interrumpido el tráfico ferroviario en toda la red.
El servicio de metro en las principales ciudades se vio igualmente afectado. Metro Madrid anunció la suspensión de todas sus líneas, mientras que en Barcelona los trabajadores del metro confirmaron la detención de los convoyes y la evacuación de los pasajeros a través de los túneles.
Por su parte, la empresa eléctrica portuguesa EDP confirmó que Portugal también sufría una avería similar, que dejaba a sus usuarios sin acceso a la red eléctrica.