El Govern se queda poco a poco sin funcionarios. No encuentra relevo para hacer frente ni a las jubilaciones que se producen ni a la demanda de nuevo personal y muchas de la plazas convocadas en el proceso de oposiciones del año 2022 han quedado desiertas. Se trata en su mayoría de plazas profesionales, es decir de labores específicas como ingenieros, arquitectos, psicólogos o informáticos.
La carencia es tan grande que el Govern ya ha tenido que poner en marcha unas 15 bolsas únicas profesionales en las que ya no solo se incluyen a funcionarios o interinos, sino que además se permite que entren personas que nunca han trabajado en la función publica. Está siendo la única manera de cubrir algunos puestos de trabajo. Ya se ha hecho en plazas de informática y psicología, pero la directora general de la Escola Balear de l’Administració Pública (EBAP), Violeta Rodríguez, está convencida de que el proceso irá a más y por eso anuncia que el Govern ha comenzado a tomar medidas.
La semana pasada se supo que ha habido una renuncia masiva de enfermeras a su plaza, hasta el punto de que hubo que recurrir al puesto número 1.200 para cubrir 800 plazas en los hospitales de las Islas. Algo muy parecido está pasando también en el colectivo de profesores de Educación Primaria, con muchas plazas que son imposibles de cubrir. «El sistema de selección no funciona», asegura Rodríguez. El problema es la naturaleza del proceso, basado en unas oposiciones donde solo se tiene en cuenta la memoria. «Se tiene que huir del sistema memorístico porque el nuevo funcionario recién salido sabe mucho de leyes y poco de su plaza», añade.
El modelo en el que trabaja el Govern es un sistema mixto. Se mantendrá una prueba de acceso basada en conocimientos técnicos, pero el nuevo plan de selección también incluirá una fase de capacitación en el puesto de trabajo, que son una especie de prácticas. Un sistema muy parecido ya se emplea en otras comunidades autónomas, como Valencia, uno de los territorios en los que se mira Baleares para hacer este proceso de renovación.
El Govern también quiere que todo el modelo sea más simple y más ágil y que no pase tanto tiempo desde que se anuncia el proceso de oposición y comienzan a realizarse las pruebas. «Hay que reducir ese tiempo desde que se anuncia la oposición hasta que el aspirante hace el examen; no pueden pasar tres años», apunta. «Hay plazas que salieron en las oposiciones de hace tres años y han quedado desiertas y en las islas de Menorca, Ibiza y Formentera la situación es aún peor», explica.
La directora de la EBAP no tiene una única explicación al hecho de que los jóvenes ya no hagan oposiciones. Cree que hay una multiplicidad de factores que explican esa falta de interés, pero está convencida de que una de ellas es el propio modelo ya caduco de solo exámenes. También cree que, en general, hay un desconocimiento de las ventajas que tiene ser funcionario, con unos sueldos aceptables si se comparan con otros trabajos en la empresa privada. «Estamos pensando en hacer campañas para atraer talento joven y que quieran ser empleados públicos», asegura. De hecho, el Govern ya ha comenzado e estar presente en las ferias de la ocupación para dar a conocer qué supone trabajar en la Administración.
El apunte
El 51,36 % de los trabajadores públicos autonómicos se habra jubilado en 15 años
Punto de vista

A parte de lo expresado en la noticia no les parece que tambien tiene que ver que las Baleares son un lugar caro para vivir y las VIVENDAS imposibles de conseguir?