Mallorca sigue siendo un destino de referencia fuera de la temporada estival. Y el alquiler vacacional sigue ganando terreno dentro de la oferta de alojamientos para quienes disfrutan de su descanso en otoño o invierno, o simplemente realizan una breve escapada. Fuera del pico veraniego, los propietarios de viviendas de alquiler turístico destilan optimismo y esperan un aumento de las reservas en estas dos estaciones que cierran el año 2024.
Así lo refleja el estudio realizado por Holidu, portal de referencia dentro del sector del alquiler vacacional y turístico, con un amplio catálogo en Mallorca. Tras una temporada estival excepcional, que ha dejado un grado de satisfacción elevado del 84% entre los propietarios, quienes mantuvieron o elevaron sus ingresos merced a este producto, las perspectivas para los meses de otoño e invierno invitan a trazar una gráfica al alza.
Tanto, que el 55% de los propietarios de Mallorca prevé mantener un volumen de reservas similar al del mismo periodo de 2023, a la par que un tercio (33%) estima que esa cifra crecerá; por contra, apenas un 11% de los encuestados contempla una reducción del interés por su vivienda, centrándose especialmente en zonas de costa o de turismo veraniego.
Respecto al precio medio de la noche dentro de esta oferta de alquiler turístico en Mallorca, más de dos tercios de los propietarios no prevé incrementar sus tarifas, contrastando con el 29% que sí tiene previsto subir los precios del alojamiento, un crecimiento que se situará entre el 5 el 13%, en función de la ubicación y la propuesta del dueño.
Llama la atención el hecho de que las protestas contra la masificación turística que ha vivido Mallorca a lo largo del verano parecen no haber tenido impacto en este segmento de negocio. Y es que un 46% de los propietarios aseguran que no les han afectado, mientras que, en el otro lado, un 8% sí admite que han repercutido en su volumen de negocio, siendo la mayoría (65%) favorables a la regulación del turismo en la Isla.